El 17 de septiembre, la Federación de Profesionales del GCABA se hizo presente con fuerza en la movilización convocada para rechazar el veto presidencial a la Ley de Emergencia Pediátrica y al Financiamiento Universitario. Fue una jornada emblemática: cientos de profesionales de la salud, estudiantes, docentes y organizaciones sindicales se congregaron frente al Congreso para defender el derecho a la salud pública y a la educación.
Ese día, la Cámara de Diputados rechazó el veto con una mayoría rotunda: 181 votos a favor, 60 en contra y una abstención. Esta victoria legislativa fue, en buena medida, fruto de la presión popular y del compromiso de quienes representamos al equipo de salud.
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Sin embargo, la lucha no terminó allí. A principios de octubre, el Senado ratificó también el rechazo al veto, con 59 votos afirmativos, 7 negativos y 3 abstenciones. Esto implica que la norma debe ser promulgada y aplicada inmediatamente según el artículo 83 de la Constitución Nacional.
Pero, a pesar del triunfo formal en el Congreso, denunciamos con preocupación un giro autoritario: las autoridades del Hospital Garrahan, bajo la intervención designada por el ministro de Salud Mario Lugones, han iniciado sumarios disciplinarios y descuentos salariales de hasta $500.000 contra trabajadores y dirigentes sindicales que participaron del reclamo. Entre los sancionados está la Secretaria General de la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT) del Garrahan, Norma Lezana, quien afirma: “Nos acusan casi de terroristas por reclamar ser recibidos por las autoridades”.
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Desde la Federación de Profesionales de la Salud de la Ciudad de Buenos Aires reafirmamos nuestro compromiso indeclinable con la defensa de la salud pública, la formación universitaria gratuita y de calidad, y el ejercicio pleno de la actividad gremial como herramienta esencial para resguardar derechos y garantizar mejores condiciones de atención.
En este marco, sostenemos nuestro apoyo activo a la lucha de las y los trabajadores del Hospital Garrahan, quienes hoy enfrentan descuentos, sanciones y medidas persecutorias por defender aquello que el Congreso convirtió en ley: la Emergencia Pediátrica y el financiamiento universitario.
Seguiremos acompañando cada instancia de organización y cada convocatoria que surja en defensa de estos derechos, fortaleciendo la unidad del equipo de salud y la presencia gremial en todos los espacios donde sea necesaria.
