
Documento consensuado por las y los presidentes de las Asociaciones federadas, que fué leído en el acto de apertura de las Jornadas de la Federación de Profesionales del GCABA:
Compañeras, compañeros, colegas,
Hoy nos encontramos aquí para debatir una situación que amenaza con alterar profundamente la estructura de nuestra carrera profesional y, con ello, el sistema de salud en el que trabajamos. Desde la Federación de Profesionales del GCABA, queremos expresar con firmeza nuestra oposición a la iniciativa que busca crear una carrera exclusiva para médicos dentro del ámbito de la salud pública de la Ciudad de Buenos Aires.
¿Por qué nos oponemos? Porque esta propuesta no es solo una cuestión administrativa o técnica: es un intento de fragmentar el sistema de salud, rompiendo la unidad de quienes día a día sostenemos la atención sanitaria en un contexto de crisis. La creación de una carrera separada para médicos traería consigo una serie de consecuencias negativas que no podemos permitir.
Primero, el impacto en los equipos de trabajo. La salud no se construye de manera aislada. El abordaje interdisciplinario es la base de una atención integral y de calidad. Separar a los médicos del resto de los profesionales implicaría una ruptura de estos equipos, debilitando la coordinación entre disciplinas y afectando directamente la calidad de la atención que reciben los pacientes.
Segundo, la inequidad laboral. Esta iniciativa jerarquiza a una profesión por sobre las demás, generando diferencias arbitrarias en derechos, reconocimiento y condiciones de trabajo. En lugar de fortalecer la carrera y garantizar mejores condiciones para todos, lo que se busca es crear una estructura desigual, en la que algunos pocos obtienen privilegios mientras el resto queda relegado.
Tercero, la precarización. Si permitimos esta fragmentación, los profesionales que queden dentro de la Ley 6035 se verán en una situación de mayor vulnerabilidad. Su capacidad de negociación se verá reducida, sus posibilidades de ascenso y estabilidad laboral serán inciertas, y se abrirá la puerta a futuras reformas que profundicen esta precarización.
Desde el punto de vista sindical, esto significa debilitar la lucha colectiva. Sabemos que nuestra fuerza radica en la unidad de todas las disciplinas. Si se divide la carrera, se rompe también la unidad gremial, dificultando las negociaciones salariales, la defensa de nuestros derechos y la posibilidad de exigir mejoras reales en las condiciones de trabajo.
Desde el punto de vista legal, esta medida establece una desigualdad inaceptable. No podemos permitir que se creen categorías diferenciadas para quienes trabajan bajo un mismo sistema, con las mismas responsabilidades y en las mismas instituciones. Hacerlo sienta un precedente peligroso que puede ser utilizado en el futuro para seguir segmentando y desarticulando nuestra carrera.
Y desde el punto de vista profesional y asistencial, esta iniciativa afecta directamente la calidad del servicio de salud. La fragmentación de la carrera conlleva la ruptura de equipos, el deterioro del trabajo interdisciplinario y, en última instancia, un perjuicio para quienes más necesitan del sistema de salud pública: los pacientes.
Por todo esto, desde la Federación de Profesionales del GCABA nos posicionamos con claridad: defendemos la unidad de la carrera, exigimos que se respeten los principios de igualdad y equidad, y nos oponemos a cualquier intento de fragmentar el sistema de salud en beneficio de unos pocos.
Convocamos a todas y todos los profesionales a seguir alertas, organizados y rechazar esta medida. Porque si tocan a uno, nos tocan a todos. Y porque la salud pública se defiende con trabajo, con compromiso y con unidad.